Chocolatito:
el mejor boxeador en la
historia de Nicaragua
Lenin Fisher
Román Chocolatito González es el mejor boxeador en la historia de
Nicaragua. Sus cifras lo demuestran y no dejan lugar a dudas.
Tetra-campeón mundial en cuatro
categorías distintas del boxeo, con 46 victorias en 48 combates, 38 nocauts y
solo dos derrotas (una por decisión y otra por nocaut), ahora, en la madurez de
su carrera.
Todos los nicaragüenses deberían
apoyar a Chocolatito, especialmente
ahora que trata de reincorporarse a su ritmo habitual de boxeador, enfrentando
hoy 15 de septiembre, el Día de la Independencia de Centroamérica, a un
peleador mexicano, Moisés Fuentes, un ex-campeón. No obstante, algunos nicas,
al mejor estilo de doña Sabina o doña Ramona (que siempre andaba detrás del
pensar y el actuar de los yanquis), quieren que Chocolatito pierda porque son intolerantes, son extremistas y son fanáticos
políticos.
La manipulación mediática de la
derecha golpista en Nicaragua ha querido restarle apoyo al Chocolatito porque ha manifestado su simpatía y respaldo al
gobierno revolucionario presidido por el comandante sandinista Daniel Ortega
Saavedra.
Pero los gobiernos sandinistas son
los que más han apoyado el deporte de nuestro país. En la década de 1980-1990,
así fue. Por esa razón, muchos deportes mejoraron y se masificó el deporte,
logrando mayor competitividad en Centroamérica y un tercer lugar en los juegos
regionales. Y más recientemente, el gobierno sandinista construyó el mejor
complejo de instalaciones deportivas, que haya tenido jamás Nicaragua, las
cuales sirvieron para celebrar los XI Juegos Centroamericanos, entre el 3 y el
17 de diciembre de 2017; evento que por primera vez se organizó en la patria de
Rubén Darío y Augusto C. Sandino. Dos meses antes, el 19 de octubre, el
presidente Ortega Saavedra había inaugurado el nuevo Estadio Nacional Denis
Martínez, un bello coloso para jugar base-ball, que compite con cualquier estadio
de Centroamérica y el Caribe y que costó 36 millones de dólares.
El gobierno actual ha apoyado a los
deportistas humildes, entre ellos a los boxeadores como Chocolatito, quien fue pupilo de Alexis Argüello, el tricampeón
mundial, de quien aprendió varios aspectos técnicos y a ser también un Caballero del Ring. No debemos olvidar
que el maestro del Chocolatito, el Flaco
Explosivo, fue también un símbolo de la reconciliación nacional de
Nicaragua.
Chocolatito, dotado de
cualidades naturales para boxear, es un valiente peleador, un fajador, que
siempre va hacia adelante, con suficiente punch y largas combinaciones de
golpes, que muy pocos boxeadores logran, se ha ganado calificativos como el
Número uno libra por libra y Atleta del año en Nicaragua. Chocolatito nunca evade el combate, nunca usa bicicleta ni
motocicleta dentro del ring, como sí lo hicieron varios boxeadores, que fueron
campeones y ganaban muchos millones de dólares por cada espectáculo, y por los cuales
había mucha gente que pagaba por verlos a través de la televisión (para ver el
fraude en que habían convertido al boxeo). Chocolatito,
con su estilo, ha recuperado la credibilidad del buen boxeo y del verdadero
boxeador; no como aquéllos boxeadores de pasarela y modelaje.
La primera derrota de Chocolatito ante Srisaket Sor Rungvisay,
por decisión, el 17 de marzo de 2017, fue claramente un robo de los jueces,
entre ellos una mujer. El fallo injusto fue para evitar que Román González
pusiera en peligro el récord invicto de Floyd Mayweather (49 victorias, 27 por
nocaut y sin derrotas), quien se había retirado en 2015. Imaginemos, que el
boxeador gringo, que vendió más de 1500 millones de dólares en pague por ver,
perdiera rápidamente su récord de invicto, por obra y gracia de un humilde
peleador nica, de las categorías menores del boxeo y que además, no oculta su
simpatía por un gobierno revolucionario y sandinista, que está haciendo una
eficiente gestión que propicia el crecimiento económico, la inversión
extranjera y el desarrollo humano en Nicaragua.
La segunda derrota, por nocaut, fue
asumida por la oposición política de derecha como una “derrota” para el
gobierno sandinista que apoyaba a Chocolatito.
Para la derecha golpista todo apoyo al deportista es manipulación, tal como
consideran que todo beneficio para la gente pobre es populismo y derroche de
dinero.
Rosendo el Búfalo Álvarez, otro gran campeón en el boxeo profesional,
defendió el derecho del Chocolatito a
pensar como quiera, señalando que como ciudadano y nicaragüense tiene derecho a
tener su propio pensamiento político e ideológico; defensa que realizó, no en
un ring, sino en el programa televisivo Detalles
del momento, al ser entrevistado por el periodista Moisés Absalón Pastora
(MAP), quien con sus editoriales y actitud nos brinda siempre un mapa
equilibrado del buen proceder de un ciudadano que ama verdaderamente a su país
y su gente.
Sin embargo, el afán de poder de
los golpistas de la derecha no debe asustarnos (incluyendo el daño causado al Estadio
Nacional Denis Martínez, en una de sus “pacíficas” protestas violentas y
golpistas), porque el antecedente más inmediato está en Brasil, donde los
gobiernos del Partido de los Trabajadores, encabezados por Lula y Dilma, fueron
capaces de sacar a 50 millones de personas de la pobreza, organizar una
olimpíada e impulsar un campeonato mundial de fútbol, en medio de las protestas
violentas de las fuerzas de derecha que solo piensan en el bienestar de los
ricos, de los millonarios, de la burguesía, de las élites, de la aristocracia,
de la oligarquía y de la plutocracia.
Finalmente, hay que decir, que
apartando honestamente toda la propaganda negra y el tsunami de noticias falsas
con que los poderosos del planeta han querido ocultar el derrotado golpe de
Estado terrorista y clasista en Nicaragua, seguramente que el boxeador Moisés
Fuentes apoyaría a un gobierno que hiciera por los pobres en México, lo que el
gobierno sandinista hace en Nicaragua por los humildes, los desposeídos, los
ninguneados, los excluidos, los marginados, los empobrecidos, los más
vulnerables, los desfavorecidos, los pobres, los proletarios, los desempleados, los de a pie, los
de abajo. Para que Moisés Fuentes vea eso, falta poco tiempo para que asuma el
poder Andrés Manuel López Obrador, quien tiene el compromiso de no defraudar a
las clases sociales más bajas de la tierra de Emiliano Zapata y Francisco
Villa.
Managua,
Nicaragua, 15 de septiembre de 2018
Escritos
de Lenin Fisher: reflexiones sobre la vida e historia de Nicaragua.
leninfisherblogspot.com