León: fundación
y cinco siglos de historia
Lenin Fisher
Algunos
señalan que la fecha de fundación de León fue el 15 de junio de 1524 (el día de
la Santísima Trinidad). Otros apuntan que fue el 19 de junio del mismo año. Y
otros más, dicen que fue el 18 de diciembre de 1524. En todo caso, fue casi 32
años después de que Cristóbal Colón llegara con sus tres carabelas a las islas
del Caribe.
Francisco
Hernández (o Fernández) de Córdoba fundó León; él no fundó León de Imabite (a
orillas del lago Xolotlán). Nunca la ciudad de León fue llamada, ni registrada
como León de Imabite. Eso es un invento reciente, malogrado, para intentar
despojar a León de la justificación y el orgullo de celebrar cinco siglos de
fundación e historia. Tampoco los españoles fundaron León Viejo, en 1524.
Solamente fundaron León. El nombre de León Viejo surgió muchos años después de
la refundación de la ciudad el 2 o el 10 de enero de 1610, en la proximidad de Sutiaba.
Asimismo,
cuando la ciudad de León buscó otro lugar de asentamiento, esta vez, en la
vecindad del pueblo indígena de Sutiaba, tampoco fue establecida, ni llamada,
ni registrada como León de Sutiaba. Esta es otra invención, un exceso de
creatividad, que no tiene sustento histórico, para justificar que, en este año
2024, Granada sí cumplirá cinco centurias y que León, sencillamente, no. Pues,
nunca los españoles, es decir, el mismo Fernández de Córdoba y su tropa
invasora, fundaron Granada de Xalteva. Simplemente fundaron Granada.
Sencillamente fundaron León.
León
siempre ha sido conocida como León Santiago de los Caballeros, aunque su nombre
correcto es Santiago de los Caballeros de León. Pero jamás se le ha llamado
León de Imabite, ni León de Sutiaba. Quienes desean llamar a León con los
nombres de los pueblos indígenas u originarios, solo buscan separar la historia
de la ciudad, como si eso pudiese hacerse. Sin obviar que lo hacen porque no
tienen una visión dialéctica de la historia y están llenos de localismo. Hablar
de León de Imabite y de León de Sutiaba es intentar reescribir la historia.
El
historiador Jorge Eduardo Arellano Sandino, de origen granadino e hijo dilecto
de León, ha dicho que no existe la escritura legal de fundación de la ciudad de
León, en 1524. También señala que la refundación de la ciudad, en 1610, fue
ilegal. Entonces, ambos eventos históricos de la urbe leonesa serían ilegales,
ilícitos e inexistentes, como diría un ministro del trabajo de un gobierno
neoliberal, a inicios de la década de 1990.
Ahora
bien, si no existe escritura de fundación de la ciudad de León, tampoco debe
existir una escritura de la fundación de Granada (ciudad que también tendría
una fundación ilegal), porque fueron fundadas el mismo año, en el mismo
contexto, ese histórico 1524, con pocos días de diferencia; siendo fundada
primero León y pocos días después Granada. Secuencia de hechos que, el mismo
Arellano Sandino ha planteado, al contrario de lo que alguna gente pensaba: que
debido a que los conquistadores, enviados del imperio español, venían del sur
del continente, desde el Darién, lo que hoy es parte de Panamá, avanzando hacia
el norte, entonces pudieron haber fundado, primero, Granada y luego León. No
fue así.
Los
avaros invasores españoles exploraron lo más que pudieron hacia el norte de lo
que sería Nicaragua, hasta el río Yaré (actualmente, río Coco), internarse en
territorio de lo que después sería Honduras (para combatir con las tropas
dirigidas por Gil González Dávila, que reclamaba su derecho de Adelantado; hecho que fue la primera batalla entre las mismas tropas españolas), y
al regresar, fundaron León, primero, y después Granada. Al fin y al cabo, ni la
historia, ni las invasiones de conquista tienen un curso lineal o
unidireccional.
Lo
más importante es que desde 1524, pasando por 1610, hasta llegar a 2024, León
ha mantenido su identidad de ciudad, su conciencia de capitalidad por muchos
años, el sentimiento de la continuidad histórica, de su relevancia, en todos
los órdenes, a lo largo de cinco centurias. Ese largo recorrido, por demás
heroico, de fundación e historia de la ciudad de León, es indivisible,
inseparable e innegable. Solamente si alguien quiere reescribir la historia
puede insistir en ello. Y si alguna academia apoyase tal cosa, es inevitable
recordar los versos darianos: “…de las Academias,
/ ¡líbranos Señor! (Letanía de nuestro señor Don Quijote. Cantos de vida y esperanza. Madrid, 1905).
Managua, Nicaragua, 10 de febrero de 2024.
Escritos de Lenin Fisher:
reflexiones sobre la vida e historia de Nicaragua.
https://leninfisher.blogspot.com/2024/02/leon-fundacion-y-cinco-siglos-de.html