domingo, 2 de diciembre de 2012

RESONANCIA MAGNETICA DEL SISTEMA NERVIOSO CENTRAL CON BOBINA DE RODILLA


Resonancia magnética del sistema nervioso central con bobina de rodilla.


Lenin Fisher1, Mayra Guido2, Reyna Zúniga2, José Gadea3, César Navas3 y Yadira López3.


RESUMEN


OBJETIVO GENERAL: Describir la experiencia de realizar y diagnosticar exámenes de resonancia magnética del sistema nervioso central con una bobina de rodilla, ante el deterioro de la bobina cerebral, en el Hospital Escuela “Antonio Lenín Fonseca Martínez” de Managua, Nicaragua, entre el 23 de agosto y el 9 de noviembre de 2012.

DISEÑO METODOLÓGICO: Estudio descriptivo, observacional, de corte transversal, retrospectivo. Se usó un resonador magnético marca SIEMENSMR, modelo Magnetom C!, de 0.35T., de tipo abierto. La bobina utilizada fue una diseñada para hacer exámenes de rodilla (extremity array XL, serie 01053, modelo 8635570 MR2U043307 y frecuencia de precesión de  14.6MHz). La población de estudio fueron 352 exámenes de resonancia magnética. Se administró, cuando existió indicación clínica, gadolinio OptimarkMR gadoversetamide en presentación e 50ml (330.9mg de gadoversetamide; 0.5mmol/ml; en dosis de 15ml., desde el inicio del examen, es decir, antes de las secuencias T2 y Flair) y con el consentimiento informado del paciente o familiar.

RESULTADOS: De los 352 exámenes realizados, sólo 27 (8%) fueron de rodilla y dos de muslo y pierna. Los pacientes fueron 224 mujeres (64%) y 128 hombres (36%). Se realizaron 323 exámenes de otras regiones del cuerpo, diferentes a las rodillas y el resto del sistema musculoesquelético,  con una bobina de rodilla. Las regiones examinadas se distribuyeron así: encéfalo 173 (54%); columna cervical 118 (37%); hipófisis 12 (4%); angiorresonancia cerebral 10 (3%); y columna lumbar en niños 7 (2%). La distribución de los diagnósticos imagenológicos fue la siguiente: hernia discal 77 (24%); normal 47 (15%); macroadenoma hipofisiario 15 (5%); otras neoplasias 15 (5%); astrocitoma 13 (4%); meningioma, quiste aracnoideo e hidrocelia con 9 (3%) cada uno; sinusitis 8 (2%); seis aneurismas; cuatro recidivas tumorales; y dos microadenomas hipofisiarios.

CONCLUSIONES: Ante una situación de emergencia por el deterioro de la bobina cerebral y para atender la gran demanda de exámenes para pacientes hospitalizados y de consulta externa, de la capital y de los departamentos del interior del país, la bobina de rodilla resultó ser una excelente opción. Durante los exámenes cerebrales se observó que los pacientes se sentían más cómodos que con la bobina cerebral, quizá debido a la mayor altura de la bobina de rodilla. La proporción de exámenes con diagnóstico normal fue baja. No hubo dificultades en la valoración de las imágenes, limitaciones diagnósticas, ni artefactos atribuibles a la bobina de rodilla. Diferentes regiones del sistema nervioso central, encéfalo y columna vertebral y médula espinal, pudieron evaluarse en adultos y niños, mujeres y hombres. Se pudo diagnosticar desde exámenes normales hasta hernias discales, neoplasias malignas (incluyendo astrocitomas), aneurismas arteriales, recidivas tumorales y microadenomas.

PALABRAS CLAVES: bobina de rodilla, columna vertebral, encéfalo, médula espinal, resonancia magnética, sistema nervioso central, 0.35Tesla.

1: Radiólogo. 2: Residente de radiología. 3: Técnico de rayos X.