martes, 13 de agosto de 2019

500 AÑOS DE LA CIUDAD DE LEÓN DE NICARAGUA


500 años de la ciudad de León de Nicaragua

Lenin Fisher

El sábado 15 de junio tuve el gusto de asistir al acto oficial del lanzamiento del programa de conmemoración de los quinientos años de fundación de la ciudad de León, que se cumplirán en el año 2024.

La actividad se realizó en el histórico auditorio Ruiz-Ayesta, de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN). Presidieron el Alcalde Róger Gurdián Vijil y la Rectora Magnífica Flor Valle.

Una magistral conferencia inaugural fue impartida por el historiador y dariísta Jorge Eduardo Arellano, sobre la importancia de León Viejo.

El doctor Arellano, granadino de nacimiento e hijo dilecto de León, dejó claro una vez más que la primera ciudad fundada por los conquistadores españoles en Nicaragua, fue León, en el territorio Nagrandano de Imabite, a orillas del lago Xolotlán, en 1524. Posteriormente, fundaron Granada, a orillas del lago Cocibolca, en el territorio de Xalteva. Por lo tanto, Granada fue la segunda fundada por el imperio español en Nicaragua.

Su fundador Francisco Hernández de Córdoba, fue decapitado en la plaza de la ciudad, por orden de Pedro Arias de Ávila (Pedrarias), quien al poco tiempo condenó a muerte a 18 caciques indígenas, por medio del castigo de los perros.

J. E. Arellano dividió en tres etapas el desarrollo de la ciudad de León, hoy llamada León Viejo, los cuales son los siguientes: primitiva, fundamental y decadencia.

En la etapa primitiva se construyeron entre 24 y 30 casas. En la etapa fundamental hubo hasta 30-34 casas construidas de mortero compactado. Para alcanzar entre 35 y 50 casas de paredes de ladrillos y techos de tejas, en la etapa de decadencia.

Para 1529, León tenía la mejor iglesia y la población era de 1300 a 1500 personas, entre los cuales había ocho tipo de artesanos. Entre 1563 y 1577 las pestes azotaron a los pobladores.

En 1531 fue nombrado el primer obispo y desde esa fecha hasta hoy León ha tenido 50 obispos. Antonio Valdivieso fue el tercer obispo de la ciudad y murió asesinado por los hermanos Contreras.

El año del esplendor de la ciudad fue 1545. Se construyeron casas uniformes, con sus propios pozos de agua y las carnicerías estaban bien abastecidas. León Viejo se convirtió en el tercer centro urbano, del istmo centroamericano, después de Guatemala y San Salvador.

Un total de 58 españoles encomenderos estaban registrados en 1548.

La población se redujo a tan solo 120 habitantes en 1594 cuando ocurrió un terremoto, que provocó el éxodo y la caída de la economía. Al año siguiente, solo había un clérigo y el diezmo era escaso.

León fue refundada el 16 de enero de 1610, en un lugar, por órdenes del clérigo, cercano al pueblo indígena de Sutiaba, clavando los estandartes donde había un árbol de guásimo, lugar donde se construiría la nueva catedral. Por tal razón, muchos años después, Máximo Jerez le llamaba el Guásimo a la Catedral.

La primera misa en la nueva ciudad de León fue celebrada el 17 de junio de 1610 y el 19 del mismo mes, el alcalde Pedro Munguía trazó el plano de la ciudad.

Las ruinas de León Viejo fueron descubiertas por la UNAN en abril de 1967, el año en que se conmemoró el centenario del nacimiento de Rubén Darío, quien escribió: León es a mí, como Roma o París.

Darío en su obra El viaje a Nicaragua e intermezzo tropical menciona que la Catedral de León, es una construcción que mide 160 x 90 metros, con un área de 1500 metros cuadrados. Reiteró Arellano que dicho libro de Darío lo debe leer todo nicaragüense que se considere medianamente culto (algo que yo lo he repetido a los estudiantes de medicina o médicos residentes en programas de especialización), y que su valor es de un tercio de lo que cuesta un buen chancho con yuca.

En lo único que no estuve de acuerdo fue cuando el conferencista dijo que Máximo Jerez es el más grande héroe de la ciudad de León, lo cual es muy discutible porque junto a Castellón, en nombre de la oligarquía liberal de León, trajo a los mercenarios y filibusteros yankees, al mando de William Walker y Byron Cole, para combatir a la oligarquía conservadora de Granada, en 1855, lo cual generó la Guerra Nacional. Walker fue más astuto de lo que Jerez y todos los liberales pensaban y se declaró presidente de Nicaragua, siendo reconocido por el delegado del gobierno de Estados Unidos, de la época, quien estuvo durante su proclamación.

Esa acción vende-patria le impediría a Jerez ser considerado un héroe grande y mucho menos el más grande de León; corriendo el peligro de no alcanzar en la lista de héroes sin fusil, que el doctor Arellano ha elaborado. Ese lugar cimero le corresponde a Rigoberto López Pérez, el poeta y periodista que ajustició al dictador Anastasio Somoza García (fundador de la Guardia Nacional bajo el auspicio del gobierno de Estados Unidos y que ordenó, con el visto bueno del embajador gringo, el asesinato a traición de Sandino) perdiendo la vida en el mismo acto, al ser acribillado, para luego su cuerpo ser desaparecido, hasta el día de hoy. Después de todo, a Walker y Somoza García, con su dictadura militar y dinástica de 45 años, los impusieron los yankees.

León fue declarado Patrimonio Histórico de la Humanidad, en el año 2000.

Estas son algunas anotaciones de la cátedra impartida por Arellano sobre León Viejo. Mi querida ciudad de León, donde nací. Santiago de los Caballeros de León o también llamada León de Nicaragua. La noble y siempre leal ciudad de León. La cálida ciudad cuna de las ideas revolucionarias y Primera Capital de la Revolución.

Managua, Nicaragua, 11 de agosto de 2019
Escritos de Lenin Fisher: reflexiones sobre la vida e historia de Nicaragua.
leninfisherblogspot.com