martes, 30 de noviembre de 2021

AGUINALDO DOBLE, JUBILACION A LOS 50 AÑOS Y OTRAS REIVINDICACIONES

 

Aguinaldo doble, jubilación a los 50 años y otras reivindicaciones

 

Lenin Fisher


Los seres humanos deben aspirar a mejorar sus condiciones de vida, a través de la construcción de sociedades más justas, desde el punto de vista económico y social. Mejorar las condiciones de vida y el nivel de conciencia de la humanidad, sin duda, ayudarían a aproximarnos a la felicidad de nuestra especie.

 

El avance tecnológico permitirá, de manera inexorable, que las máquinas con inteligencia artificial trabajen por los hombres, mientras éstos se dedican a dirigirlas, supervisarlas, repararlas y a disfrutar la riqueza generada por las primeras, distribuyéndola de una forma cada vez más equitativa.

 

Los gobiernos revolucionarios, como el existente en Nicaragua y los otros países del Alba podrían, en determinado momento dar ese salto de calidad, una vez que se desarrollen más la economía y sus fuerzas productivas.

 

Por tal razón, no es descabellado que en nuestros países se llegue a convertir en una norma, más temprano que tarde, el aguinaldo doble, es decir, que los trabajadores tendría no solamente un décimo-tercer mes, sino que también, un décimo cuarto mes de salario.

 

En Nicaragua a ningún trabajador le caería mal un segundo aguinaldo, que podría ser alrededor de junio. Existen antecedentes de esa práctica en El Salvador y en el Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS). Se puede empezar con un 25% del valor del aguinaldo acostumbrado, para aumentar cada dos o tres años, a 50%, 75% hasta alcanzar el 100% del aguinaldo navideño.

 

Otra reivindicación que no estaría en los cuernos de la Luna, sería la jubilación universal y obligatoria para todos los trabajadores, lo cual tendría dos grandes ventajas: 1) mayor oportunidad de trabajo para los jóvenes; y 2) los jubilados tendrían más tiempo para disfrutar de su jubilación. Al fin y al cabo, trabajamos para vivir y no deberíamos vivir para trabajar.

 

También sería posible que a las mujeres embarazadas se les beneficie con la extensión hasta dos años del periodo prenatal y postnatal. Asimismo, las mujeres podrían llegar a trabajar solamente la mitad del tiempo que trabajan los hombres; pero con derecho a igual salario, para que tengan tiempo de brindar atención a sus hijos, familiares ancianos o con discapacidades, al hogar, etc.

Mientras tanto, la mejoría del salario mínimo, del salario promedio y del salario según el nivel técnico y profesional, son batallas importantes; sin olvidar, que en algún momento será necesario el estímulo del aumento salarial y del ascenso en categoría, casi olvidados por el neoliberalismo, tanto en la empresa privada como en el ámbito público.

Además, debe encontrarse una fórmula que permita no vivir devaluando nuestra moneda nacional ante ninguna divisa extranjera. No digamos que no se puede de primas a primeras.

En conclusión, está justificado reflexionar sobre estos tópicos económicos, sociales y salariales porque el capitalismo neoliberal nos ha hecho creer que la contradicción principal o la lucha fundamental es entre los salarios de los hombres y las mujeres; o bien, en que si los hombres o las mujeres tienen más poder o cargos; y peor aún, que lo principal es atender a las demandas de minorías, que a veces solo tienen que ver con caprichos de “opciones sexuales”, cuando la mayoría necesita mejorar sus condiciones de vida a través de los salarios y de las políticas públicas integrales.

Si nadie lo propone, entonces, cuando yo sea candidato presidencial lo haré ¿?. Al final de cuentas, casi nada es imposible.

 

Managua, Nicaragua, 30 de noviembre de 2021

Escritos de Lenin Fisher: reflexiones sobre la vida e historia de Nicaragua.

leninfisherblogspot.com

https://www.blogger.com/blog/post/edit/1006068090057512799/952124576768688311